jueves, 15 de noviembre de 2012

RESPIRACIÓN BUCAL (Parte I): ETIOLOGÍA Y SINTOMATOLOGÍA

INTRODUCCIÓN:

La relación de la respiración bucal con las deformidades de la arcada dentaria y del paladar duro, el estrechamiento facial y el hipodesarrollo mandibular ya fue descrita en el siglo pasado1.

Respiración bucal es la respiración que el individuo efectúa a través de la boca, en lugar de hacerlo por la nariz, no obstante que la respiración bucal exclusiva es sumamente rara2.

La respiración nasal es imprescindible para un buen desarrollo de las funciones orofaciales y, por consiguiente, un crecimiento esquelético armonioso1.

La respiración por vía oral es una alteración de la función de respiración o disfunción respiratoria que afecta sin distinción a personas de todas las edades, desde niños hasta adultos.

Las dificultades respiratorias pueden producirse a nivel nasal, de la nasofaringe, bucofaringe o de todo el tracto respiratorio superior, pero en todos los casos se rompe el equilibrio funcional y el sujeto se convierte en respirador bucal3.

Sabemos que el trayecto fisiológico del acto respiratorio es el siguiente: fosas nasales, faringe, laringe, tráquea, bronquios y pulmones.

La respiración nasal filtra, purifica, entibia y humidifica el aire inspirado. El cambio de modo respiratorio, sea bucal o mixto, altera estas funciones. El aire que entra directamente por la boca ya no recibe este tratamiento de limpieza, calentamiento y humidificación antes de pasar a las vías aéreas inferiores. Por lo tanto, el riesgo de infección es mayor1.

Cuando la vía de entrada no es la cavidad nasal hablaremos de disfunción. Esta disfunción puede impedir que otras funciones que se producen en la boca se puedan ejecutar con normalidad, como es el caso de la deglución4.

La respiración oral está vinculada a la deglución atípica, las maloclusiones, las alteraciones de articulación y voz, siendo uno de los principales factores causales de desequilibrio orofacial durante la infancia.

Ante una dificultad respiratoria nasal sea parcial o total, se altera el proceso fisiológico y se establece de forma temporal o permanente la respiración por boca.

La respiración bucal provoca la inhalación de un aire frío, seco y no liberado de gérmenes, muy agresivo para las vías aéreas inferiores, pudiéndose provocar procesos infecciosos3.

En el respirador oral o bucal están alteradas la forma de respirar (de nasal a oral), el tipo respiratorio que puede ser torácico o clavicular y la capacidad vital generalmente se encuentra reducida.

Podríamos decir entonces que la disfunción respiratoria es el inicio de una serie de disfunciones y alteraciones que trascienden incluso al Sistema Estomatognático* (S.E.)3.

Las alteraciones respiratorias son una causa frecuente de trastornos miofuncionales1. Por este motivo, el diagnóstico y la rehabilitación dependen, por lo general, de la actuación de un equipo multidisciplinario que incluye Otorrinolaringología, Logopedia, Ortodoncia, entre otros.

*Sistema o Aparato Estomatognático: El aparato masticatorio está constituido por la dentición, los maxilares y todas las estructuras que contribuyen a la dinámica masticatoria: articulación temporomandibular, músculos de apertura y cierre, lengua, labios y mejillas. Todos estos elementos forman una unidad vital orgánico-funcional indivisible la cual se denomina Aparato Estomatognático (Canut, 2000 citado en Pastor Vera, 2008).


Fig. 17: LABIO CORTO


ETIOLOGÍA:

Investigar las causas de la respiración oral es necesario para comprender la génesis de los desequilibrios musculares, funcionales, las alteraciones de la mordida,… que presenta cada paciente.

El paciente respirador oral (niño o adulo) manifiesta severas dificultades para respirar por nariz, situación que obedece a múltiples factores como veremos a continuación.

Las causas de este modo de respiración son2: un pasaje nasofaríngeo angosto asociado a una membrana nasal inflamada, adenoides, cornetes inflamados y desviaciones del tabique nasal. Entre las causas citadas, las adenoides son las más comunes.

Actualmente se considera que las principales causas de respiración oral son las amígdalas y adenoides hipertróficas. En la práctica clínica se habla de “hipertrofia” adenoidea o amigdalar cuando se observa un agrandamiento de dichos tejidos4.

Entre las alteraciones más frecuentes de las vías aéreas superiores podemos destacar1:

Desviación del tabique nasal.

Hipertrofia de las vegetaciones adenoides.

Malformaciones de los huesos nasales.

Hipertrofia de cornetes nasales.

Bronquitis y alergias respiratorias.

Las causas de la obstrucción nasal son muy diversas1:

Atresia de las coanas.

Tumores nasales.

Hipertrofia amigdalar y adenoidea.

Fractura nasal.

Pólipo nasal.

Existen, sin embargo, otros factores locales2:

Rinitis crónica, infecciones periódicas de las vías respiratorias superiores, alergias, asma, pólipos, cuerpos extraños, desviaciones del tabique, fracturas no reducidas y ambiciosos tratamientos quirúrgicos de las fisuras palatinas, todos los cuales pueden producir distintas obstrucciones al fluir natural del aire a través de la cavidad nasal.

No obstante lo anterior, algunas personas respiran por vía bucal debido a una postura viciosa, sin que existan obstrucciones mecánicas o funcionales1.


Fig. 18: FACIES ADENOIDEAS


SINTOMATOLOGÍA:

La presencia de respiración bucal suele estar asociada a un patrón facial específico: cara larga y angosta con paladar estrecho y alto1.

A través de los años numerosos investigadores se interesaron por el paciente respirador oral. Uno de ellos fue Leech (1958) que describe las características tras el estudio de 500 pacientes en una clínica de enfermedades respiratorias1:

Posturas corporales atípicas.

Aumento de las infecciones del aparato respiratorio.

Faces adenoidea, larga y estrecha.

Estrechamiento de la arcada dentaria superior, del paladar y de las narinas, por falta de uso.

Labio superior hipotónico, corto y alto.

Encías hipertróficas.

Lengua en posición atípica, sin ejercer su función modeladora del paladar y con tonicidad alterada.

Olfato alterado y frecuente asociación de disminución del apetito y de la función gustativa.

Hiperplasia de los tejidos linfoides alrededor de la trompa de Eustaquio.

Mala oxigenación cerebral, que ocasiona dificultades de atención y concentración, con los consiguientes problemas de aprendizaje.


Estas características pueden aparecer o estar asociadas a otras, pero no tienen por qué aparecer siempre4.

La gran mayoría de los pacientes que son respiradores bucales desde la niñez poseen características físicas y faciales comunes. Actualmente añadimos otras características a las descriptas por Leech (1958)1:

Habla imprecisa, con exceso de salivación y sigmatismo anterior o lateral.

Frecuentes disfonías.

Deglución atípica y masticación ineficaz.

Mordida de clase II, overjet, mordida cruzada o abierta.

Protrusión de los incisivos superiores.

Hipodesarrollo de la mandíbula.

Babeo y ronquidos nocturnos.


Los signos clínicos de las facies del respirador oral podrían definirse, de forma general, por la cara de cansancio. Este tipo de pacientes tiene unas características faciales determinadas4:

Cara estrecha y larga.

Altura facial inferior aumentada.

Malposición dentaria con incisivos a la vista.

Bolsas palpebrales.

Mejillas flácidas.

Nariz pequeña y respingona (ausencia de función del tercio medio de la cara).

Orificios nasales pequeños, poco desarrollados y orientados hacia el frente.

Cortedad de los labios y posición entreabierta de la boca.

Labio superior corto e incompetente.

Labio inferior grueso y caído.

Borla del mentón hipertónica.


Estos signos no siempre están presentes, pero en general el niño tiene un aspecto facial de persona enferma4.


Fig. 11: RESPIRACIÓN ORAL CON INTERPOSICIÓN LINGUAL


La obstrucción nasal crónica producirá vicios posturales de la lengua que comprometerá, entre otras, la deglución, la posición en reposo de la lengua y la articulación fonética4.

Otra característica en los pacientes respiradores bucales es la flexión posterior de la cabeza, como tratando de aumentar el espacio aéreo1.


DIFERENCIAS ENTRE LA RESPIRACIÓN NASAL Y ORAL:

Cuando la vía de entrada del aire no es la cavidad nasal, además de afectar las condiciones del aire inspirado, repercutirá negativamente en las estructuras óseas y musculares adyacentes, ya que la forma de realizar la respiración nasal es muy diferente a la de la respiración oral4.

Cuando la respiración se realiza por la nariz se estimula el crecimiento de los maxilares conjuntamente con las demás funciones orofaciales1.


Características de la respiración nasal4:

Inspiración nasal. Estimula los procesos de reabsorción ósea y del crecimiento.

Labios cerrados. Se establece un equilibrio de la musculatura orofacial y masticatoria.

Lengua en posición correcta (contra el paladar). Facilita el crecimiento transversal del paladar y posibilita una adecuada deglución.

La respiración nasal es determinante para el crecimiento correcto y armónico de la cara, el equilibrio muscular, la oclusión dental y las funciones orofaciales.

Características de la respiración oral4:

Inspiración a través de la cavidad oral con adaptación postural de la lengua.

Descenso de la mandíbula e hipotonía de la musculatura masticatoria.

Hipotonía del músculo orbicular.

Dificultad para ejecutar una correcta deglución.


Además, en el paciente con respiración oral o bucal se alteran las posiciones de reposo de lengua y labios como vemos a continuación.

Posición de la lengua en reposo: En posición baja, adelantada, apoyada contra los incisivos inferiores o interpuesta entre las arcadas dentarias. Esta postura baja de la lengua facilita la entrada del aire por la boca.

Cuando la lengua, además de baja, se encuentra adelantada, ejerce presión contra los dientes anteriores. Como los labios están entreabiertos no actúan como contención1.

Posición de los labios en reposo: Incompetentes (separados), el labio inferior es fláccido y evertido, el labio superior es corto y con los incisivos a la vista.


CONCLUSIONES:

La respiración oral/bucal es una disfunción respiratoria que se presenta con elevada frecuencia y constituye una de las principales causas de desequilibrio orofacial en la población infantil.

Familias y pacientes suelen desconocer las consecuencias a veces irreversibles de la respiración oral, motivo por el cual consultan cuando la sintomatología está instalada o cuando son derivados por un especialista.

Conocer la etiología del trastorno orofacial es indispensable y permite al logopeda planificar la intervención en coordinación con el resto de profesionales del equipo de salud: Ortodoncia, Otorrinolaringología, Odontología, etc.

Numerosos autores consideran que las principales causas de obstrucción nasofaríngea son las amígdalas y adenoides (vegetaciones) hipertróficas y el origen de la respiración por boca.

La respiración oral es un hábito primario, y, por lo tanto, desencadenante de otros hábitos. Conocer este hecho es importante para determinar cuál es el factor etiológico de maloclusiones, de disfunciones, de desequilibrios musculares y, en definitiva, para planificar tratamientos en terapia miofuncional y ortodoncia4.

Recordemos que el niño que utiliza su nariz para respirar presenta una situación de equilibrio funcional, muscular y esquelético: labios juntos, una corriente de aire nasal, lengua contra el paladar en posición de reposo y durante el acto de la deglución.

Por el contrario, el respirador oral manifiesta una situación de desequilibrio entre las estructuras faciales: labios entreabiertos, músculos hipotónicos (ej: buccinador), ausencia de corriente de aire nasal, lengua baja y generalmente adelantada para facilitar la entrada del aire.

Por un lado, las alteraciones respiratorias pueden ocasionar trastornos miofuncionales graves, y por otro, es imprescindible para un buen desarrollo de las funciones orofaciales que la vía de entrada del aire sea la nariz, lo que repercutirá positivamente en un crecimiento óseo armonioso4.

El diagnóstico precoz, seguido de un tratamiento temprano y eficiente, puede frecuentemente prevenir, al menos, un factor mayor que contribuya a los efectos progresivos de la deformación dentofacial2.

El abordaje de estos trastornos orofaciales debe estar enfocado desde un punto de vista multidisciplinar para obtener resultados óptimos y duraderos en el menor tiempo posible.


Las imágenes han sido tomadas de Pastor-Vera (2008). Capítulo 1: Análisis y descripción de la respiración: diferencia entre la respiración oral y la respiración nasal. Fig. 17 Labio corto, Fig. 18 Facies adenoideas y Fig. 11 Ejemplo de paciente con hábitos combinados: respiración oral con interposición lingual. Tesis Doctoral. Citada en bibliografía.


Artículo publicado el 15 de noviembre de 2012, revisado y actualizado por la autora en octubre de 2024.


BIBLIOGRAFÍA:

  1. Zambrana Toledo González N, Dalva Lopes L. Logopedia y ortopedia maxilar en la rehabilitación orofacial. Tratamiento precoz y preventivo. Terapia miofuncional. Ed. Masson. Barcelona, España. 1ª ed. 1998.
  2. Segovia ML. Interrelaciones entre la Odontoestomatología y la Fonoaudiología. La Deglución Atípica. Ed. Médica Panamericana. Buenos Aires, Argentina. 1988.
  3. Grandi D, Donato G. Terapia Miofuncional. Diagnóstico y Tratamiento. Ed. Lebón. Barcelona, España. 2006.
  4. Pastor Vera, TV. Análisis correlacional de las secuelas estructurales y funcionales que son ocasionadas por la respiración oral y que condicionan la deglución. Tesis Doctoral. Universitat Ramon Llull, Barcelona. 2008. Accesible en: http://hdl.handle.net/10803/9263

miércoles, 24 de octubre de 2012

EL NÓDULO VOCAL (Parte II): “DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO”

Los nódulos vocales son la lesión benigna de la laringe diagnosticada con más frecuencia en mujeres (maestras, profesoras y cantantes) y en la edad pediátrica.

Los nódulos vocales son lesiones bilaterales y generalmente simétricas secundarias a un abuso vocal crónico.

Su tratamiento se basa en la rehabilitación vocal (tratamiento conservador). La cirugía se reserva para aquellos casos donde la Logopedia no ofrece buenos resultados.

Estas lesiones que se producen por abuso y mal uso vocal en los adultos, producen una disfonía por hipertensión laríngea (exceso de tensión muscular a nivel laríngeo).

Los pacientes con nódulos en general, se caracterizan por ser grandes conversadores y están habituados al uso del volumen elevado. Este exceso de funcionamiento laríngeo con mínimos descansos vocales entre sus actividades laborales diarias, es un factor etiológico a considerar durante la intervención del logopeda.

Son personas con las características típicas de toda disfonía hiperfuncional, entre las que destacan el ataque glótico duro, los abusos vocales, el aumento de tensión muscular en la laringe como lo explicaba en: EL NÓDULO VOCAL (ParteI): ETIOLOGÍA Y SINTOMATOLOGÍA


DIAGNÓSTICO:

Los de presentación aguda son lesiones puntiformes, translúcidos y aspecto edematoso. Los nódulos crónicos son blanquecinos, fibróticos, de mayor tamaño1.

La distinción esencial entre los crónicos y los agudos se efectúa mediante la estroboscopia: los nódulos agudos acompañan a la onda mucosa en su progresión mientras que los fibróticos no lo hacen y la onda mucosa se ve disminuida (Hirano & Bless, 1993 citado en Farías, 2007).

El correcto diagnóstico otorrinolaringológico es esencial, ya que en ocasiones en lugar de nódulos bilaterales lo que realmente hay en cuerdas vocales es un quiste unilateral (adquirido) y una lesión contralateral por contacto.



Nódulos con cierre glótico en reloj de arena. El paciente con disfonía. ORL Sin recurrir a exploraciones complementarias*.

Nódulos en cuerdas vocales, en aducción/fonación. En los nódulos bilaterales es característico el hiatus glótico con un defecto de cierre anterior y posterior, también llamado hiatus en ocho o en reloj de arena.


TRATAMIENTO:

En tratamiento logopédico casi siempre es indispensable. Consiste en la corrección de los defectos en la respiración, de la técnica del canto, de la clasificación inexacta, de la impostación, etc., es decir, en modificar en lo posible las causas que se supone originaron la patología2.

El tratamiento será conservador por medio de terapia vocal en un primer término para los nódulos agudos y crónicos, intervención encaminada a lograr la eliminación de abusos vocales y lesiones existentes, en la mayoría de los casos.

La reeducación puede hacer desaparecer los nódulos pequeños, no operados, y a veces impedir la recidiva de los que lo fueron2.

La terapia vocal es casi siempre recomendable como primer procedimiento3. Si el paciente pide la cirugía (ej. cuestiones de agenda), deberá saber que la terapia de voz post-quirúrgica evitará que los nódulos reaparezcan.

Hay que aclarar al paciente que la disfonía y el nódulo pueden recidivar si persisten las causas que los han provocado (el esfuerzo, la mala técnica, el exceso de fatiga)2.

Recordemos que la causa principal de estas lesiones se debe a una disfunción fonatoria (mal uso/abuso vocal), por tanto, la reeducación será imprescindible en estos cuadros de inicio funcional que degeneran en una disfonía orgánica-funcional con el paso del tiempo.

La microcirugía se realizará en aquellos nódulos que no presentan regresión con la terapia de la voz, o los que estén muy organizados3.

Tras la cirugía, la rehabilitación vocal tiene por objetivo tratar los factores que en su conjunto pueden provocar la recidiva de los nódulos: la hiperfunción laríngea, el abuso vocal, una higiene vocal incorrecta o ausente, etc.


LA TERAPIA VOCAL:

En la actualidad la terapia de voz es el abordaje inicial para el diagnóstico de nódulos vocales por los resultados exitosos que se obtienen tras la intervención.

Tradicionalmente se derivaban a logoterapia las disfonías consideradas funcionales mediante un criterio de clasificación aplicado al paciente que tenía síntomas vocales, pero sin lesión detectada en los exámenes de rutina. En tales casos al paciente lo enviaban a rehabilitación vocal, mientras que a los pacientes con lesiones en la laringe se les indicaba cirugía4.

La terapia de la voz juega un rol muy importante tanto para los nódulos tempranos como para los tardíos. Se debe trabajar para eliminar las conductas abusivas, mejorar la higiene vocal, disminuir el cierre glótico brusco, aumentar el apoyo respiratorio y disminuir la intensidad de la voz3.

La meta de la terapia vocal será la identificación y reeducación de las acciones musculares que llevaron al paciente al mal uso de la voz.

También se deberá corregir la conducta de abuso vocal y crear un programa de higiene vocal adaptado a la cotidianeidad de cada paciente.

El objetivo primario será concienciar al paciente de las alteraciones fonatorias que presenta mientras se elabora la historia clínica (anamnesis y evaluación de la voz) que servirá de base para el posterior plan terapéutico.

En la terapia vocal de los nódulos es necesario suavizar el ataque vocal, aumentar el soporte del aire para lograr una eficiencia vocal y reducir la intensidad o el volumen de la voz3.

El entrenamiento de la función respiratoria será uno de los objetivos principales de la terapia vocal. Se iniciará al paciente en el tipo respiratorio costodiafragmático a través del cual se trabajará la coordinación fonorrespiratoria (aire-voz).

El paciente deberá estar familiarizado con conceptos tales como diafragma, apoyo, presión subglótica, ataque, etc., explicados en el artículo: LA RESPIRACIÓN EN LA TERAPIA DE VOZ

Es muy importante informar al paciente sobre nociones de anatomía y fisiología respiratorio-fonatoria para que pueda comprender el proceso normal y modificar los patrones erróneos de su actual disfonía.

Se entrenará la respiración costodiafragmática mediante ejercicios que son comunes a todo tipo de disfonías, descriptos en LA PRÁCTICA RESPIRATORIA: EJERCICIOS

Para el tratamiento de estas lesiones el logopeda/fonoaudiólogo dispone de una variedad de ejercicios, métodos y técnicas en la literatura y cuya elección dependerá de las características de cada paciente, debido a la inexistencia de modelos terapéuticos para cada patología.

Dentro de las opciones para el abordaje de la voz, el profesional se decantará por aquellos ejercicios que actúen sobre el mecanismo de hiperfunción, el ataque brusco y la coordinación fono-respiratoria.

El plan terapéutico incluirá los objetivos propuestos según el diagnóstico, los ejercicios y técnicas seleccionadas para ese paciente, el tiempo aproximado de terapia y el pronóstico.



Los nódulos vocales son la lesión benigna de la laringe diagnosticada con mayor frecuencia en mujeres: maestras, profesoras y cantantes. También es la lesión de la laringe más habitual en la edad pediátrica.

El tratamiento de elección es conservador (terapia vocal) realizado por un profesional de la Logopedia/Fonoaudiología.

La rehabilitación de la voz se llevará a cabo a través de ejercicios vocales tendientes a la remisión de los nódulos, en el marco de un tratamiento individual y personalizado.


CONCLUSIONES:

La disfonía por nódulos vocales es un desorden vocal causado por abuso/mal uso que responde satisfactoriamente a la rehabilitación logopédica (terapia vocal).

Es un trastorno por uso excesivo o inadecuado de la voz que se manifiesta con tensión muscular laríngea de grados variables, situación que promueve la aparición de las lesiones (disfonía traumática fonatoria)2.

Con carácter general el pronóstico es favorable, aunque se deberá tener en cuenta durante la intervención la antigüedad de la disfonía y la lesión (nódulos agudos o crónicos) si es unilateral o bilateral.

Con la terapia de voz, las medidas higiénicas y el reposo vocal parcial (según la severidad de la disfonía), un alto porcentaje de nódulos desaparecen en corto tiempo.

Estas alteraciones secundarias a una hiperfunción laríngea se pueden prevenir modificando hábitos vocales erróneos y abusivos, siguiendo un programa de higiene vocal y considerando el entrenamiento de la voz normal.

La voz es un instrumento de expresión y comunicación que requiere de unos cuidados especiales durante todo el año que contribuya a mantener la necesaria salud de la laringe.

Su uso racional y consciente se impone en los profesionales de la voz cantada y hablada: cantantes, actores, locutores, teleoperadores, magisterio, profesorado, monitores deportivos, guías de turismo, oradores políticos, abogados, vendedores, etc.


El logopeda es el profesional sanitario habilitado para intervenir los trastornos de la voz en todas las etapas de la vida: desde la edad pediátrica hasta la población de la tercera edad.

Exija siempre un logopeda titulado y colegiado para garantizar una atención de calidad.

Rechace y denuncie el intrusismo profesional y todo ejercicio irregular de la profesión en el Colegio Oficial de Logopedas de su Comunidad Autónoma.


*Fuente de la imagen expuesta: Iniesta Turpín J, Arce Martínez R. El paciente con disfonía. ORL SIN PRUEBAS COMPLEMENTARIAS. Escobar Sánchez C. Editor. 4ª ed. en formato digital. Disponible en: https://www.gaesmedica.com/es-es/orl/cuello/paciente-disfonia


BIBLIOGRAFÍA:

  1. Farías, P. Ejercicios que restauran la función vocal. Ed. Akadia. Buenos Aires, Argentina. 1ª ed. 2007.
  2. Segre R, Naidich S. Principios de Foniatría. Ed. Médica Panamericana. Buenos Aires, Argentina. 1981.
  3. Jackson, Menaldi, C. La Voz Patológica. Ed. Médica Panamericana. Buenos Aires, Argentina. 2002.
  4. Behlau, M. Rehabilitación Vocal. En: García Tapia R, Cobeta Marco I. editores. Diagnóstico y Tratamiento de los trastornos de la voz. Ed. Garsi, Madrid, España. 1996. p. 339-54.

viernes, 19 de octubre de 2012

EL NÓDULO VOCAL (Parte I): “ETIOLOGÍA Y SINTOMATOLOGÍA”

INTRODUCCIÓN:

El diagnóstico de nódulo vocal constituye uno de los motivos más frecuentes de consulta médica, otorrinolaringológica (ORL) y logopédica.

Los nódulos se describen como engrosamientos situados en la unión del tercio medio anterior con los dos tercios posteriores, zona central de la porción vibrátil de las cuerdas vocales y de mayor impacto durante la vibración1.

Al nódulo vocal se lo considera una disfonía mixta, llamada también disfonía orgánico-funcional y producida como consecuencia de la continuidad en el tiempo del abuso/mal uso de la voz.

En la mayor parte de los casos una disfonía organicofuncional es una disfonía funcional diagnosticada tarde, bien sea por retraso del paciente en buscar solución a su problema o bien porque las exploraciones clínicas no detectaron la posibilidad de que se desarrollara una lesión secundaria2.

Los nódulos suelen presentarse con relativa frecuencia en maestros, telefonistas, entrenadores, cantantes, etc3. Predominan en mujeres. Se los suele llamar “nódulos en beso” por su aparición bilateral1.

Los nódulos de las cuerdas vocales constituyen uno de los trastornos más comunes en las personas que abusan de la voz. Si bien pueden presentarse a cualquier edad, son más frecuentes entre niños varones y mujeres adultas3.

Es importante aclarar que los nódulos vocales responden favorablemente al tratamiento conservador (terapia vocal).

La microcirugía se realizará en aquellos nódulos que no presentan regresión con la terapia de la voz, o los que estén muy organizados3.


NÓDULOS CORDALES FIBROSOS


El nódulo vocal, del cantante o del gritón, se debe al mal uso y al trauma vocal repetido. Suele ser bilateral y simétrico, en el borde libre de la cuerda vocal en la unión del tercio anterior y los dos tercios posteriores4.

La imagen nódulos cordales fibrosos, pertenece a: El paciente con disfonía. ORL Sin recurrir a exploraciones complementarias4.


ETIOLOGÍA:

Como la causa principal de aparición de los nódulos es la fonotraumática, el grado de severidad de la disfonía dependerá del nivel de mal uso/abuso vocal y no de la lesión en sí. De tal forma podemos encontrar pacientes con nódulos sin alteración mayor de la calidad vocal (suele ocurrir en pacientes con técnica vocal, locutores, cantantes) y pacientes con voces muy disfónicas y nódulos pequeñísimos1.

La probable fisiopatología de los nódulos vocales se debe al traumatismo por esfuerzo vocal, que al aumentar la tensión y prolongarse en el tiempo, produciría congestión vascular, edema y hemorragia submucosa3.

En general, los laringólogos están de acuerdo en que los nódulos son la consecuencia de esfuerzos o de prolongada fatiga, de mala clasificación, o de una deficiente técnica vocal5.

En la génesis de la disfonía destacan el mal uso y abuso vocal, el reflujo faringolaríngeo y el tabaquismo, causas explicadas en: LA PREVENCIÓN EN DISFONÍAS

Como factores asociados se pueden mencionar las infecciones de vías aéreas superiores, alergias, factores psicoemocionales y una deficiente o ausente higiene vocal.



Los nódulos vocales constituyen uno de los motivos más frecuentes de consulta médica, ORL y logopédica.

Suele ser el temor de los cantantes, aunque muchas veces no interfieren en la producción de la voz. Algunos cantantes refieren que presentan incapacidad para elevar la frecuencia y sensación de realizar mayor esfuerzo al cantar. Cuando son demasiado grandes, la voz es aspirante o soplada3.

Se trata de pequeñas prominencias redondeadas del borde libre de las cuerdas vocales, relativamente frecuentes en los profesionales de la voz, por lo que se los ha llamado nódulos de los cantantes. Raramente se los ve en un solo lado, porque las causas que los producen suelen afectar a ambas cuerdas5.


SINTOMATOLOGÍA:

Los síntomas son todos los de las disfonías funcionales: dolor, picazón, fatiga al hablar, extensión tonal desplazada (hacia graves) y acortada, pérdida de la voz con el incremento de uso1.

El síntoma más común es la disfonía, ronquera con voz áspera, tendencia a tonos graves y fatiga vocal con el correr del día3.

El nódulo está precedido de una disfonía más o menos pronunciada que afecta tanto la voz hablada como la cantada. La voz de conversación resulta opaca y velada por un soplo aéreo sobrepuesto. Para superar esta dificultad, el paciente intenta hablar con más fuerza y carraspea a menudo para eliminar un mucus persistente y molesto5.

Aunque el síntoma principal es la disfonía el paciente puede presentar en su voz o mecanismo fonatorio una o varias de las siguientes características:

Ronquera. Voz áspera. Voz soplada. Voz diplofónica.

Esfuerzo al hablar. Fatiga vocal (cansancio al hablar).

Cierre glótico insuficiente (hiatus).

Hiperfunción del mecanismo vocal.

Sensación de cuerpo extraño al tragar.

Constricción en la zona faringo-laríngea.

Reducción de la intensidad y la frecuencia.

Ataque vocal (inicio de la fonación) brusco o duro.

Cenestopatías: molestias o dolor faríngeo y laríngeo.


Se analizan a continuación algunos síntomas:

Voz áspera vs voz soplada:

La aspereza en la voz se produce por el aumento de contacto entre cuerdas vocales o por hiperaducción cordal que puede llegar en ciertos casos hasta la hiperfunción. La voz áspera es habitual en lesiones de masa unilaterales (ej. nódulo) que generan asimetría vibratoria o vibración irregular de la cuerda vocal.

La voz soplada en cambio, se corresponde con un déficit de cierre glótico por la presencia de masa en cuerdas vocales (ej. nódulos bilaterales) resultando en una emisión aireada o aire en la voz como consecuencia del menor contacto cordal (hiatus).

Estos tipos de voces que se relacionan con diferentes calidades vocales (timbre) son el resultado del grado de aducción de cuerdas vocales. El contacto cordal (fricción) insuficiente va a determinar una voz soplada, mientras que un contacto mayor que el necesario generará una voz áspera.

Dicho en otras palabras, estas variaciones en la voz dependerán del aumento o disminución del contacto cordal durante la fonación y de la fase del proceso: nódulos en etapa aguda o crónica, lesión unilateral o bilateral.

Hiperfunción del mecanismo vocal:

En las disfonías por exceso de tensión muscular o hiperfunción del mecanismo vocal se puede observar diplofonía.

Voz diplofónica:

La diplofonía se trata de la emisión simultánea de dos tonos diferentes producidos por la desigualdad en la vibración de las cuerdas vocales, situación habitual en patologías asimétricas o lesiones unilaterales: pólipo, nódulo, quiste, etc.

Ataque vocal brusco o duro:

El ataque brusco (comienzo del sonido) también llamado golpe de glotis o ataque glótico duro se manifiesta con una aducción rápida de las cuerdas vocales en forma previa al inicio del sonido, característica de la disfonía hiperfuncional.


¿CÓMO AFECTAN LOS SÍNTOMAS A LA VOZ?

La sintomatología afectará de manera proporcional a la voz hablada y cantada, repercutiendo también en la calidad de vida de la persona según el grado de severidad y antigüedad de la disfonía.

La voz se deteriora debido a la presencia del nódulo que modifica el patrón vibratorio de la cuerda vocal y se altera el sonido final.

La vibración de las cuerdas vocales se verá afectada en cambios orgánicos como tumores y en cambios secundarios a mal uso vocal tales como los nódulos. Al impedirse el cierre glótico por presencia de masa, la fonación se vuelve soplada, aireada1.

La voz proyectada se produce a expensas de un comportamiento de sobreesfuerzo, tensión en los músculos del cuello (extrínsecos de la laringe) y de la cara.

En estos casos de lesiones secundarias a mal uso/abuso vocal se altera la vibración de las cuerdas vocales y el cierre glótico será incompleto por la presencia de masa (el nódulo).

La no coaptación glótica de forma completa dejará un hiatus anterior y posterior (en ocho) o un hiatus medio posterior (en Y) generando una voz soplada o emisión aireada.

Recordemos que la reducción del patrón vibratorio agrava la voz y con ella desciende la frecuencia fundamental, situación que se manifiesta en cuerdas vocales con lesiones de masa: nódulos, pólipos, edemas, etc.

Toda lesión que ocupe espacio entre cuerdas vocales (nódulos, esbozos nodulares, pólipo, quiste, etc.) evitará en mayor o menor medida el cierre glótico y la fonación resultante será soplada1.


CONCLUSIONES:

Los nódulos son formaciones benignas consecuencia del traumatismo y el estrés crónico por mal uso y abuso vocales. Por lo general son bilaterales, pero pueden aparecer de forma unilateral donde un edema o una inflamación se presentan en el lado opuesto3.

El nódulo es un trastorno orgánico-funcional causado por una disfunción laríngea en la que interviene el mal uso de la voz mantenido en el tiempo.

Estas alteraciones se observan con mayor incidencia entre los profesionales de la voz cantada y hablada, especialmente en los educadores y el profesorado.

Los nódulos bilaterales son el resultado del traumatismo vocal crónico, por tanto, no basta con tratar las lesiones con cirugía, es preciso una rehabilitación vocal.

Emplear una técnica vocal incorrecta altera la fisiología fonatoria, produciendo trastornos de inicio funcional que con el paso del tiempo pueden generar lesiones laríngeas a veces irreversibles.

Lo anteriormente dicho nos lleva a reflexionar sobre la atención especial que merece la voz, ya que es esencial en la interacción que tenemos constantemente con el medio que nos rodea, máxime en aquellas personas que la utilizan como herramienta primaria de trabajo.


BIBLIOGRAFÍA:

  1. Farías, P. Ejercicios que restauran la función vocal. Ed. Akadia. Buenos Aires, Argentina. 1ª ed. 2007.
  2. Behlau, M. Rehabilitación Vocal. En: García Tapia R, Cobeta Marco I. editores. Diagnóstico y Tratamiento de los trastornos de la voz. Ed. Garsi, Madrid, España. 1996. p. 339-54.
  3. Jackson, Menaldi, C. La Voz Patológica. Ed. Médica Panamericana. Buenos Aires, Argentina. 2002.
  4. Iniesta Turpín J, Arce Martínez R. El paciente con disfonía. ORL SIN PRUEBAS COMPLEMENTARIAS. Escobar Sánchez C. Editor. 4ª ed. en formato digital. Disponible en: https://www.gaesmedica.com/es-es/orl/cuello/paciente-disfonia
  5. Segre R, Naidich S. Principios de Foniatría. Ed. Médica Panamericana. Buenos Aires, Argentina. 1981.

lunes, 10 de septiembre de 2012

LA HIGIENE VOCAL EN EL AULA O AMBIENTE LABORAL

INTRODUCCIÓN:

La población que se dedica al ejercicio de la docencia y cuya herramienta primaria de trabajo es la voz, suele iniciar su actividad laboral cada curso escolar sin una técnica vocal aprendida para el ejercicio de su profesión.

En líneas generales, desconoce la mecánica de la fonación y la importancia de cuidar la voz para prevenir la aparición de disfonía y lesiones en la laringe (temporales o permanentes).

Estos profesionales de la enseñanza acostumbran a realizar esfuerzo para hablar y emplear su voz de forma inadecuada por ausencia de entrenamiento vocal, situación que a través del tiempo puede promover la Fatiga Vocal y la Disfonía

El personal docente debiera prestar especial atención al mal uso y abuso vocal, factores que pueden ser la principal o única causa del origen de la disfonía, como lo explicaba en LOS FACTORES CAUSALES DE DISFONÍA

Por diversos motivos las condiciones de trabajo en las aulas o sitios para impartir clase son desfavorables para la salud de la voz. Por esta razón, un recurso útil es mostrar cierta exigencia durante los primeros meses para que el alumnado se acostumbre a la intensidad de voz hablada del educador/a.

Si se utiliza un volumen moderado constante, posiblemente se reduzca el ruido de fondo generado por los alumnos ya que éstos tienden a imitar y adaptarse al docente o tutor.

Todo el personal que se dedica a la educación y formación es considerado profesional de la voz (hablada) y un colectivo de riesgo por el empleo de la voz proyectada.

Además, es bien sabido que el exceso de uso de voz hablada es una característica predominante en la actividad docente1.

Esta exigencia diaria de la profesión, obliga al educador a incorporar a su vida una serie de acciones para conservar sana su laringe, por la evidente importancia que tiene como instrumento de trabajo para el desarrollo óptimo de sus funciones.

Para conseguir este propósito será necesario mantener una forma de vida saludable, cuidar la higiene vocal y considerar el entrenamiento de la voz normal con logopeda.

Las siguientes indicaciones preventivas quizás no se puedan cumplir de manera estricta, pero cada profesional en su puesto de trabajo procurará hacer todo lo posible por acercarse a estos objetivos.


LAS INDICACIONES PREVENTIVAS:

Efectuar reposo vocal (no hablar) luego de un intenso y prolongado uso de la voz.

Evitar los cambios bruscos de temperatura y las corrientes de aire frío en el ámbito laboral, social y en el hogar.

Vestir prendas que no opriman el cuello ni la región costodiafragmática, para facilitar la libertad de los movimientos respiratorios y fonatorios.

Reducir al mínimo las situaciones que alteren el equilibrio emocional: falta de sueño, vida agitada, agotamiento, estrés, etc.

Realizar reposo vocal parcial durante la jornada de trabajo, según lo permita la edad del alumnado y la materia impartida.

Utilizar tizas antipolvo y otros recursos: rotuladores para escribir en pizarra de plástico, pizarra digital interactiva, material audiovisual, etc.

Recurrir al lenguaje escrito y corporal: palmas, chistidos, gestos no vocales, silencios, caminar entre el alumnado y cualquier código que se establezca con éstos para atraer su atención.

Mantener la higiene y ventilación de los espacios comunes del personal docente y aulas, las que deben estar libres de polvo y con la pizarra fregada cada día por el equipo de limpieza.

Reducir el ritmo general, aumentar los momentos de descanso vocal y mejorar el aislamiento acústico del aula o centro, si el ruido externo es intenso y constante (patio, tráfico…) y obliga a elevar el volumen de la voz.

En situaciones de faringitis, laringitis, etc. no se auto-medique y siga las indicaciones de su médico o del otorrinolaringólogo (ORL). Reposar la voz en la fase aguda y evitar acudir al puesto de trabajo para favorecer la recuperación de la voz.



LA HIDRATACIÓN:

La hidratación está recomendada fuertemente por todos los terapeutas de la voz2.

La aplicación de la hidratación a los problemas de la voz se utilizó en todo el mundo durante décadas3.

Un adecuado nivel de hidratación es una indicación fundamental para el profesional de la voz, especialmente para aquellos que se dedican a la enseñanza.

Farías (2007, cap.7) en el PROGRAMA DE CUIDADOS VOCALES. HIGIENE DE LA VOZ se refiere a la hidratación incluida en las Indicaciones Preventivas que se personalizan a cada paciente con disfonía tras la evaluación y dice: La capa superficial de las cuerdas vocales debe ser bien lubricada para disminuir la fricción de la vibración. La cantidad y el tipo de líquidos que se ingieren permitirán o inhibirán la secreción mucosa normal a nivel cordal2.

En la misma línea, Jackson, Menaldi (2002, cap.17) en su PLAN DEL CUIDADO VOCAL EN EL PROFESIONAL DE LA VOZ, describe 24 Pautas Generales para mantener una Voz Normal, siendo la número 1. Tomar agua, por lo menos de 8 a 10 vasos por día3.

Se aconseja mantener una hidratación constante bebiendo sorbos de agua mientras permanezca hablando, para favorecer una emisión vocal eficiente y evitar las molestias típicas al hablar que provoca la sequedad laríngea, comentado también en el artículo: LA PREVENCIÓN EN DISFONÍAS

Se recomienda la toma diaria de un mínimo de 8 vasos de agua, la humidificación del ambiente circundante (evitar aire acondicionado o calefacción excesiva) y la respiración nasal2.



LOS SÍNTOMAS DE ALTERACIÓN VOCAL EN EL AULA:

El profesional de la educación deberá permanecer atento a los posibles síntomas y signos de alteración vocal para consultar rápidamente al ORL o logopeda, con el objetivo de evitar que el problema se agrave.

Entre la población docente son habituales los siguientes signos y síntomas:

  • Fatiga vocal.
  • Ronquera.
  • Disfonía.
  • Afonía (ausencia total de voz).
  • Carraspeo y tos.
  • Esfuerzo para hablar.
  • Volumen elevado y gritos.
  • Dolor durante la fonación o deglución.
  • Sensación de falta de aire al finalizar las frases.


DECÁLOGO PARA EVITAR EL MAL USO Y ABUSO VOCAL EN EL TRABAJO:

  1. Impartir las clases situado en el centro de la sala, aula, auditorio, etc.
  2. Hablar cara a cara con las personas y colocarse cerca de su interlocutor.
  3. Evitar el ataque vocal brusco o duro (golpe de glotis) al inicio de la fonación.
  4. Eliminar el hábito del carraspeo y/o la tos para aclarar la garganta.
  5. Evitar las voces de mando, los gritos y el volumen elevado constante.
  6. Hablar lentamente, gesticulando, haciendo pausas y respirando adecuadamente.
  7. Colocar el auditorio en forma de U y desplazarse por la sala mientras emite su discurso.
  8. Recordar la regla 60/10: si debe hablar durante 60 minutos, haga silencio los siguientes 10 minutos.
  9. Procurar brevedad en su disertación, capacidad de síntesis y evite las repeticiones innecesarias.
  10. Utilizar medios de amplificación para evitar competir con el ruido exterior si debe trabajar al aire libre.


SE RECOMIENDA BEBER ENTRE 8 Y 10 VASOS DE AGUA AL DÍA


CONCLUSIONES:

Como se ha explicado anteriormente, quienes utilizan la voz vinculada al trabajo necesitan emplear una técnica vocal y respiratoria adecuada para conservar la salud de la laringe.

La educación de poblaciones tan específicas como la docencia, requiere actuar desde la prevención primaria con el objetivo de reducir los abusos o el mal uso de la voz, que pueden derivan en patología vocal.

La prevención primaria abarca el conjunto de actividades sanitarias realizadas antes de que aparezca una determinada enfermedad (ej. lesión en cuerdas vocales).

La educación preventiva de los problemas vocales se debe abordar en las escuelas primarias públicas y privadas, tanto para los niños como para el personal docente. Por medio de la educación se puede evitar que el problema se produzca y también su recurrencia3.

La educación vocal, en tanto medida de prevención primaria, debiera constituirse como asignatura obligatoria en los planes de estudio de aquellas carreras que lleven a un uso intensivo de la voz tal como ocurre con la docencia. Las medidas de prevención primaria se aplicarán en torno al ambiente, a la persona y a la voz1.

La higiene vocal debería transformarse en una disciplina para quienes utilizan la voz vinculada al trabajo y también, la manera diaria de evitar acciones contraindicadas que pongan en riesgo la salud de la voz.


Artículo publicado el 10 de septiembre de 2012, revisado y actualizado por la autora en noviembre de 2024.


BIBLIOGRAFÍA:

  1. Farías, P. La Disfonía Ocupacional. Ed. Akadia. Buenos Aires, Argentina. 2012.
  2. Farías, P. Ejercicios que restauran la función vocal. Ed. Akadia. Buenos Aires, Argentina. 1ª ed. 2007.
  3. Jackson, Menaldi, C. La Voz Patológica. Ed. Panamericana. Buenos Aires, Argentina. 2002.